"Los hechos y/o personajes del siguiente Blog son ficticios, cualquier similitud con mi vida personal es pura coincidencia."



sábado, 26 de junio de 2010

Y así será ♪

Se que algún día voy a extrañar estas noches, en las que vuelvo a ser la misma de antes pero un poco menos triste. Noches que no terminan, noches de apuntes, café, chocolates, de distraerme fácil con la tele, el perro y tentarme por escribir para dejar un registro de que estuve, mientras todos dormían yo escuchaba.
Suena de fondo floricienta jaja, mientras me lloran los ojos y todavía no logro distinguir si por nostalgia o por el ardor de la luz del monitor que me incandila después de haber tenido un ojo tapadao durante todo el día. No se si estoy contenta o no debería, más bien a juzgar por lo mal que me está yendo en terminos generales, definitivamente tendría motivos como para no estarlo. Pero se que estoy a una mínima fuerza de voluntad de cambiarlo, y la condenada no aparece, porque me encanta esa adrenalina, esa desesperación y angustia barata que produce el descarrilamiento de los acontecimientos. Es excitante llevar las situaciones al límite y salvarlas en última instancia, he aquí mi fundamento del por qué estudio diez horas antes de rendir, porque si estudiaría dos semanas antes como buena ñoña que debería ser, le quitaría la gracia, el nerviosismo, y la futura sorpresa y alegría duplicada en el caso de salir limpiamente satisfactoria.
La vida es riquísima, pero a mi gusto le falta algo de sabor, y por eso hay que vivir condimentándola.
No estoy para metáforas, pero creo que me hago entender. Lo lineal aburre. Y con esto no estoy excusandome de todas las cagadas que me mando, por supuesto que no, muchas de ellas son errores no premeditados, pero crecí entre y sobre los mismos, por lo que aprendí a hacer de cada uno un escalón para seguir subiendo. No es que me sienta orgullosa ni mucho menos, más cuando se que hay muchos que llegan a la misma altura sin la necesidad de haber pasado o haber hecho lo que yo, pero bueno cada uno tiene sus tiempos y sus maneras, y mientras me den a elegir siempre voy a tender por torcerme casi naturalmente aunque no quiera.
Hoy ya sábado me siento al límite, al límite de todo lo que me propuse hace un tiempo y no conseguí, en parte por falta de iniciativa mía, y un poco también de culpa le corresponde a la mala fortuna. Pero el límite no está sobrepasado, nunca podría sobrepasarse, porque el tiempo para empezar está delimitado unicamente por la muerte... asique mientras viva tengo oportunidades de virar tod positivamente a mi favor. Pero si estoy al límite de la meta que me propuse personal e íntimamente. Creo que no puedo hacer bien dos cosas al mismo tiempo, hasta que no descarte la primera parte de la facultad, no voy a poder empezar conmigo... y relegué todo por el estudio, y hoy me encontré con que a la una y veinte todavía no había emepezado y ya me quedaban menos de veinte horas... Entonces, si salgo bien parada perfecto! (cosa que lamentablemente y con toda la angustia, impotencia y bronca hacia mi misma en mi pecho confieso que no sucederá) pero podría haber rellenado todo el tiempo que invertí en fanteasear con un futuro mejor, que no alcanzo por que nuna arranco, con justamente iniciativas, esfuerzos e ideas para cambiarlo.
Aca está la clara contradicción: yo, cuatro de la mañana, preocupada porque no llego, es más factible que me ponga a inventar la máquina del tiempo, a que me ponga las pilas y estudie en las pocas horas que me queden. Aca me ven, distrayéndome, escribiendo boludeces que ni yo leo, en vez de estar sentada estudiando. Y lo más triste es que si antes de que salga el sol, invento esa condenada máquina del tiempo, volvería las horas y hasta los días atrás las veces que fueran necesarias y aun así, siempre seguiría llegando a las cuatro de la mañana del día de hoy, teniendo leídos un capítulo y medio.
Soy así, ciertas cosas nunca van a cambiar y lo acepto, pero ahora el acertijo por resolver está en encontrar la forma de que continuando a mí manera pueda modificar el desencadenamiento de las situaciones para el beneficio propio.


En fin, quedan pocas horas para que amanezca, me fui a construir la máquina del tiempo.