"Los hechos y/o personajes del siguiente Blog son ficticios, cualquier similitud con mi vida personal es pura coincidencia."



miércoles, 7 de julio de 2010

Everything's Gonna Be Alright :)

Circuito: del cuarto al comedor, del baño a la cocina, del patio al balcón. La casa me abruma, de la cama a la computadora es mi elección. Hoy me quedé en casa, el día se volvió domingo y yo ya no se si ponerme a hablar con las cerámicas del piso, o llevarme el teléfono y ponerme a hacer de recepcionista de mi propia flia.

Dos llamados, una sonrisa, una negativa, dos expectativas, una dulce espera, un par de alternativas... Estratégicamente tengo el abecedario completo de planes para ser feliz. Si me fallan todos, entonces voy a empezar a agregarle numeritos y hacer los intentos infinitos.
Tengo una gripe, casi les podría jurar mortal por momentos, no me puedo mover, me cuesta respirar (aunque no si culpar al cigarrillo) y mi cabeza aprovechó y se tomó el primer vuelo a Valencia. Siento que por más que no todo esté yendo muy bien, las cosas siguen estando en mi manos y que es cuestión de que quiera ejercer control para dominarlas, enderezarlas y hacer que todo marche finalmente perfecto. Entendí, que cuando uno quiere, alcanza, hace, logra y gana. Y yo... de vez en vez quiero. De vez en vez quiero encontrar trabajo, de vez en vez quiero promocionar alguna materia, de vez en vez quiero encontrar a alguien para enamorarme, de vez en vez quiero (o necesito) ser feliz...
Así como tantas otras veces, quiero andar desocupada, desaprobada, desenamorada e infeliz. Puede sonar ilógico y hasta me parece razonable que se nieguen a creerme, pero es la realidad, muchas veces (mayoritariamente) me gusta que mi vida ande patas para arriba. Porque es en el ejercicio de virarla, en el esfuerzo por reacomodarla donde encuentro el placer, el triunfo, el cumplido.
Hoy es uno de esos días en donde me cansé de empujar, y necesito que todo esté más tranquilo, que las cosas marchen bien, y poder encontrar un lugar en donde sentirme cómoda, o al cual sentir que pertenezco, un espacio a donde pueda volver cada vez que me desvío o me equivoco, y me ampare, que me defina como quien soy, que me conozca. Aunque este deseo me dure menos de un mes, aunque a los treinta días me canse como pasa SIEMPRE y se derrumbe y entonces vuelva instantáneamente a querer desorganizarlo todo, porque lo perfecto y calmo me aburre y yo necesito la adrenalina, el miedo, el arrepentimiento, y otros sentimientos fuertes para sentirme plenamente viva y entretenerme (claro está ¿no?). Pero por el momento voy a bajar un cambio, y voy a darle la posibilidad a la buena vida a que me convenza de que es mejor vivir en el progreso que vivir arruinando las oportunidades y desperdiciando los años.
Siento algunos años más encima, no se hasta donde deja de ser algo malo y empieza a ser bueno. Pero hay un poco de ambas.